Limpie a fondo el acuario antes de su instalación, para eliminar posibles residuos. Para ello necesita uno o dos cubos nuevos que no hayan estado en contacto con detergentes u otra sustancia química, y que de ahora en adelante servirán exclusivamente para el cuidado del acuario.

De ninguna manera se deben limpiar los cristales (ni siquiera el de arriba, ni los exteriores) con un limpiacristales químico ya que es muy fácil que algunas gotas lleguen accidentalmente al interior del acuario.